domingo, 11 de julio de 2010

Una perspectiva del mundial África 2010

Lastimosamente el mundial de fútbol ha terminado, con el se fue esa sensación de fiesta, también el estado de ansiedad al esperar cada partido, nadie puede negar haber tenido una excusa para no ir a trabajar, para quién alguna vez se perdio un partido y estando en una parada de autobús, no se podía resistir comenzar una conversación con un ambiguo: ¿quién ganaría?, a medida que el mundial avanzaba un exceso de entusiasmo nos impulsaba a buscar distintas formas de disfrutarlo, Yo solo volví a contratar DirecTV para ver Meridiano TV mas nítido de lo que logro verlo con señal al aire, e inclusive en el trabajo, un compañero ideó la forma de transmitirlo a través de nuestra red interna.

A pesar de todo me ha quedado ese sabor en la boca de que algo falto y aún no logro descifrar que fue, si bien cada mundial es distinto y aún cuando este estuvo lleno de muchas sorpresas, no corresponde a ser un "mundial perfecto", lo que me lleva a preguntar: ¿Qué a fin de cuentas fue lo mejor de este mundial?, adivinando sus respuestas no creo que haya sido la muestra de organización que ofreció la FIFA y a riesgo de que me crucifiquen, tampoco la calidad de fútbol mostrada por las potencias que se dieron cita en África y ni hablar de las estrellas individuales que con bombos y platillos de goleadores llegaban a este mundial, brillo mas las predicciones de un Pulpo jugandose su futuro para no ser picadillo de un chef, que cualquier otro jugador en la cancha jugandose el honor de su camiseta, sin duda habrá quien esté en desacuerdo conmigo, pero tranquilos, "¡pasatelo con soda!" suele decir un amigo.

Quizás también cabe preguntarse: ¿qué fue lo peor del mundial?, para mi fue no ver a Venezuela por primera vez golpeando el balón en un cancha a los ojos del mundo, Yo jamás he vestido la camiseta de ningún otro equipo y sentir el orgullo de por primera vez vestir una vinotino es lo que quizás hizo falta para que África 2010 fuera perfecto, pero no siempre se puede conseguir lo que se quiere, aún así, Yo escogí mis equipos y tengo que admitir que tras cada encuentro no le pude atinar a ningún marcador ya que mi apuesta siempre iba por el equipo aparentemente mas "débil", justamente porque apostaba a la sorpresa y al rompimiento de la etiqueta básica de cada partido.

Adiós a las vuvuzuelas, adiós a las fallas arbitrales, adiós al juego sucio, adiós al waka waka, por lo pronto, por bueno o malo que haya sido este mundial de fútbol, no queda sino darle gracias por las alegrías ofrecidas, por crisparnos los nervios al punto del infarto, por provocarnos un sentimiento de emoción en un deporte que se merece toda la atención del mundo, con antología por este mundial digo: ¡que bello es el fútbol!.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy excelente aporte k0k buenas linesas. "Howarang"

Wilmer Jaramillo M. dijo...

Gracias "Howarang Knife".