Fútbol, tecnología y el negocio.

Mucho se habla en este mundial de Fútbol acerca de las inconsistencias de los jueces, el protagonismo arbitral que muchas veces cae en lo histriónico y la insistente tontería de la FIFA de no incluir la tecnología en los partidos de fútbol, al menos 2 partidos que alcanzo a recordar se encuentran en tela de juicio por inacertadas decisiones arbitrales al negar sus goles:
USA - Eslovenia (Gol invalidado a USA que le quita 3 puntos)
Inglaterra - Alemania (Gol invalidado para inglaterra para poder igualar en 8vos)

Pero aquí no termina todo, dos situaciones inversas al concederlos:
Brasil - Costa de Marfil (Gol de Fabiano usando las manos).

Argentina - México (Gol en un claro fuera de lugar de Tevéz )

Esto hace imperante que la FIFA reaccione al argumento sostenido de sus autoridades sobre "mantener el sentido humano del fútbol" que en mi opinión es un argumento muy tranquilo así como una negación a la complejidad del proceso evolutivo que viene presentado este deporte, ¿cómo podría interpretarse un evento que esta representado por 210 países en distintos niveles de competencia -según pude contar en el ranking de la FIFA porque en wikipedia apuntan 208 asociados- con la capacidad de detener por completo las actividades de un país y hasta establecer treguas periódicas de combate?, en un canal de televisión deportivo decían que "...de medicina y de fútbol todo el mundo parece saber..", entonces ¿cómo se puede esconder o perder bajo el manto de la tecnología el sentido humano de este deporte?, ya hoy en día el tenis es el mejor ejemplo que puedo conseguir de su implementación, ya que no solo es un apoyo arbitral sino que también se muestra eficiente.

Más bien lo que ocurre en el fútbol es el sentido contrario de su humanización, una industria que genera mucho mas que el producto interno bruto de algunos paises en este continente y que al igual que la Iglesia Católica, una de las instituciones no gubernamentales mas influyentes del mundo que no deja de llamar la atención sobre los verdaderos intereses de quienes dirigen y dignifican este deporte.

Ya es hora de recomponer los pedazos de todos estos últimos mundiales y no dejar que la justicia poética conspire contra las inacertadas sentencias arbitrales, así que la implementación de la tecnología debe dejar de ser un simple debate y convertirse en una realidad del fútbol.

Gastromundial

Esta vez el mundial no solo esta en Sudafrica, también en mi cocina, semejante a la emoción de un gol fue lo que consegui con mi proyecto de fin de semana, justo en la vispera del día del padre tuve un pollo estorbandome en el refrigerador y decidi hacer algo diferente, y es que han pasado meses desde que no consiento mi estomago con algo de gourmet amateur.

En noviembre del año pasado hice unas ricas costillas de cerdo a la mostaza que acompañe en su momento con arroz y papa, fue una receta sencilla y rápida, está vez tomaria como base la misma receta con algunos cambios menores pero con el mismo entusiasmo.

...Y es que la mostaza es uno de mis sabores favoritos, esta vez quise robarle la receta al Amigo Lorenzo Camaripano quien años atrás durante mi estancia en Guarenas nos sorprendio con una cena en donde la mostaza también era protagonista, intente contactarlo para que me la diera pero lamentablemente no lo hizo a tiempo, sin embargo, con ayuda de Internet y un poco de sentido culinario pude improvisar un rico y suculento Pollo a la Mostaza.

Los ingredientes fueron:

1 Pollo entero.
2 Salchichas alemanas tipo Debrecziner picantes.
1 Pimentón verde y amarillo.
1 Limón.
1 Mazorca.
Ajo, perejil deshidratado y pimienta gourmet ( Blanca, negra, verde y roja entera ).
Aceite de oliva.
Vino Blanco.
Mostaza amarilla.

La mezcla es sencilla y hay muchas variantes, Yo seleccione los ingredientes arriba porque era lo que tenia en el refrigerador, manzana y otras carnes podria ser consideradas tambien, dando inicio a mi improvización preferí descuartizar el pollo en lugar de hornearlo entero, luego de limpiarlo bien y quitarle la piel lo bañe en limón por unos pocos minutos, le unte al recipiente aceite de oliva dispersándolo uniformemente con una servilleta, luego unte el pollo generosamente con la mostaza, le agregue la pimienta a mi gusto ¡y fue bastante!, también el ajo picado y use un poco de salsa de ajo adicional, pique los pimentones en tiras y las salchicas en rodajas, aquí tengo que confesarle que no sabía como iba a quedar porque o se me iba achicharrar o le daria un extraño sabor a la mezcla, finalmente junte todo y le agregue encima el poquito vino blanco que quedaba en el bar.

Cubrí con papel aluminio para que el pollo no quedara tan seco y de allí para el horno pre-calentado a 250°C, estuve atento de que no se me quemara así que estuve revisándolo cada 1/2 hora lo cual me costo unas pocas quemaduras en la mano derecha porque se me olvidaba agarrar el mango con un trapo de cocina pero no fue nada grave. Mas tarde me di cuenta que el pollo estaba expulsando mucho caldo así que lo saque y lo verti en un vaso en lugar de desecharlo y al final fue una acertada decisión porque el pollo estaba poniendose muy seco.

Mientras tanto cocine las mazorcas en agua hirviendo por 20 minutos, luego de 1 hora y media saque el pollo del horno y se las agregue untadas con mantequilla, cubrí nuevamente con el papel aluminio y espere 1 hora mas.

Luego de una larga espera y constante observaciónm, tomo 3 horas y media estar listo, lo saque y lo servi adornando el plato con el perejil el cual en su estado deshidratado tiene un sabor imperceptible, Yo de todas maneras prefiero el cilantro pero no tenia en ese momento.

Y ya para terminar se puede acompañar con vino blanco o cualquier otra bebida, Yo le di el turno a un té frío y en casa completamente solo :(.

El vino y la mostaza sin duda fueron los sabores que le dieron ese cambio que buscaba en el pollo y bueno la salchicha alemana picante sirvio de distracción para el paladar.

Por sobre todo me diverti mucho en mi proyecto de fin de semana y espero este domingo hayan muchos goles que celebrar.

¡Buen Apetito y Feliz día del Padre!.